El departamento del Guaviare se ha caracterizado por una débil presencia del Estado y el conflicto armado en Colombia han hecho que la región sea una de las de mayor producción de cultivos ilícitos (3.200 Hectáreas de coca, SIMCI 2020). Además, presenta alta tasas de deforestación (14.417 Hectáreas, 2019), el acaparamiento ilegal de la tierra y amenazas contra la biodiversidad. Todo esto ha motivado que las comunidades rurales queden aisladas y no se integren con las dinámicas socioeconómicas del resto del país. La cobertura y la calidad de los servicios de educación, salud y seguridad son muy inferiores a los promedios nacionales. En particular en materia de desarrollo social, y según la medición de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) en el departamento del Guaviare, éstas son del 76,1%, mientras que el promedio en el país son del 36,6%.

Las investigaciones están permitiendo conceptualizar y validar el modelo de implementación de los Principios IAR de la FAO en regiones en posconflicto caracterizados por la baja presencia del Estado y por economías ilícitas (cultivo de coca). De esta manera, contribuyen de forma significativa a la mejora de los medios de vida sostenibles, en especial para los pequeños productores y la erradicación de la pobreza, el fomento de la igualdad social y de género y, por tanto, la consecución del desarrollo ambientalmente sostenible.