Título del Proyecto: | Análisis de la Regionalización para el Desarrollo Local en Uruguay |
Carácter del Proyecto: | Internacional |
Entidad financiadora: | Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) de la Presidencia de la República |
Entidades participantes: | Universidad Politécnica de Madrid, Universidad de Córdoba, Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) de la Presidencia de la República |
Duración: | 2002-2005 |
Investigador responsable: | Adolfo Cazorla y Eduardo Ramos |
Nº de Investigadores: | 6 |
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ANÁLISIS DE LA REGIONALIZACIÓN PARA EL DESARROLLO LOCAL EN URUGUAY
ANTECEDENTES
El Proyecto “Análisis de la Regionalización para el Desarrollo Local en Uruguay” cofinanciado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) de la Presidencia de la República, se inició en Septiembre de 2002 y concluye con la tercera misión llevada a cabo entre el 21 y el 28 de abril de 2005.
DESARROLLO DEL PROYECTO
Para llevar a cabo el proyecto se realizaron tres misiones en Uruguay, cada una con objetivos complementarios, en el curso de las cuales el equipo de trabajo fue consolidando los avances alcanzados contrastándolos con los diferentes interlocutores del País.
Primera misión.
De acuerdo con lo establecido en la Ficha de Identificación del Proyecto, el objetivo General era la promoción del Desarrollo Local orientado a superar o corregir las desigualdades que, en términos de desarrollo, existen entre Montevideo y el interior del País.Para contribuir al logro de este Objetivo General se estableció como Objetivo Específico el Estudio de las Bases para una Regionalización del País, a realizar a través de las Fases de Trabajo siguientes:
- Definir Criterios para identificar Regiones.
- Definir las Regiones.
- Proponer Políticas de Inversión.
Desde estas premisas el objetivo de la primera Misión del Proyecto consistió en efectuar una valoración de las necesidades y posibilidades de una regionalización orientada a mejorar la eficacia de las transferencias de recursos hacia el Interior, en el marco del proceso de descentralización del País. Para ello se tomaron en consideración las limitaciones y los actores de bloqueo de mayor importancia para la viabilidad del Proyecto.
Otro de los avances fundamentales fue proponer la cohesión territorial como objetivo base para una discriminación positiva de los territorios más desfavorecidos. La adopción de este enfoque permite avanzar en la distinción entre territorios con situaciones de partida heterogéneas, y el objetivo de cohesión permite, por ejemplo, canalizar la inversión hacia los proyectos que, de forma consensuada y transparente, sean más capaces de reducir el grado de disparidad territorial, así como otras decisiones de discriminación positiva.
Segunda misión.
Las disparidades entre los territorios se pueden determinar por diferentes métodos. La identificación de conglomerados o agrupamientos territoriales que ostenten carencias o grado de retraso semejante constituye un paso previo en el proceso de Regionalización. Así, resulta más sencillo identificar y definir los ámbitos espaciales que tienen necesidades equivalentes, razón por la que se les puede denominar Regiones-Objetivo o regiones de atención prioritaria. Definidas así, estas regiones no son otra cosa que un instrumento flexible en manos del planificador y del gestor para fomentar e inducir la emergencia de estrategias de desarrollo de base local que afecten a distintos Departamentos y se formulen en el ámbito de una región prioritaria (estrategias regionales).
Por ello el objetivo central de la segunda Misión, llevada a cabo en septiembre de 2003, fue avanzar en el diseño de una metodología, basada en indicadores contrastados y aceptados, que permitiese establecer criterios transparentes para una posible regionalización flexible del País, y que éstos fuesen social y políticamente aceptados.
El enfoque de Regiones Objetivo y de Estrategias Territoriales, que se adoptó como resultado de la segunda Misión, presenta como ventaja el hecho de no establecer una nueva organización rígida del territorio, lo que, en términos de desarrollo, permite a los Departamento mayores opciones de asociación en función de sus intereses y disponibilidades coyunturales.Además, esta fórmula simplifica el proceso administrativo y político de su implantación al basarse en el principio de acción voluntaria en lugar de corresponder a decisiones descendentes del Poder Ejecutivo.
Entre esta misión y la siguiente tuvo lugar un viaje de capacitación de los representantes uruguayos a España, donde pudieron observar como el aparato conceptual que se estaba elaborando en el proyecto se aplicaba en la realidad europea.
Con la tercera y última misión concluyó un trabajo de casi tres años. La excepcional situación que ha supuesto la finalización del proyecto en un momento político de enorme relevancia para el País, constituía una oportunidad inigualable para que las propuestas y lineamientos del proyecto fuesen llevados a cabo. Por ello el objetivo de esta misión fue definir las propuestas de acción que se consideraban pertinentes para guiar un proceso, de fuerte carácter político y con profundas implicaciones para el País, de manera que pudiese garantizarse la viabilidad político-administrativa.
En este sentido se valoró como fundamental el criterio de gradualidad, con acciones que pudiesen implementarse de forma inmediata y con un alcance a corto plazo, y por otro lado acciones que requieren un periodo de maduración y un alcance a medio-largo plazo. Además las propuestas se ajustaron a las necesidades del modelo de desarrollo deseado, a las instituciones y los recursos potencialmente involucrados, y a los instrumentos legales existentes.